Yo sé que decidimos que íbamos a comentar sobre cuatro partes de la novela, pero yo voy a dividir la lectura en dos partes para hacer más fácil el trabajo de comentar. (Pienso que Jorge hará lo mismo). Bueno, en la primera mitad de este capítulo, vemos un poco más de las vidas de los mellizos, Jaime y Nicolás. Me gusta esta vista más profunda de sus característicos y sentimientos, porque Isabel Allende no nos ha dado mucha descripción de ellos hasta este punto en el libro. El contraste que vemos entre los dos es inmenso, y yo adivino que va a crear problemas en el futuro.
Para comenzar con el principio, me gusta mucho la primera oración de este capítulo: “Clara y Blanca llegaron a la capital con el lamentable aspecto de dos damnificidas.” Es una declaración muy fuerte, y por eso me llama la atención. Cuando Clara regresa a la capital, ella se enfoca muy intensamente en los pájaros, y en mi opinión es increíble que ella pueda enfocarse en algo tan trivial como los pajáros en un tiempo así. Me parece que ella tiene que pegarse a algo tan menial para evitar los acontecimientos más tristes de su vida. En esta parte, otra vez vemos el contraste entre Blanca y Clara: Blanca está fijada en la tierra, mientras Clara está fascinada por los almas que habitan la casa (de verdad, este capítulo está lleno de los contrastes).
Después, podemos enfocarnos en la situación de Blanca. Por supuesto, es un situación terrible—ella está embarazada con el niño de Pedro Tercero García, pero cree que él ya está muerto por acción de su padre, entonces no ve otra opción que casarse con Jean de Satigny, aunque ella no tiene ningún sentimiento romántico hacia él. Y todo el tiempo, Esteban solamente está quejándose del escándolo que este embarazo puede crear en la comunidad. Vemos que, de verdad, él solamente piensa en sí mismo, y está sumergido en la forma de la cual los acontecimientos trágicos de los otros van a afectarle a él. La única parte cómica de esta situación es la reacción de Jean de Satigny. Allende lo describe perfectamente en la página 228: “El novio....en ese folletín.” En la página 229, en la descripción de la boda, hay un ejemplo de la exageración característica de Gabriel García Márquez, y aún más contraste, esta vez entre Jean de Satigny y Blanca: “el novio orgulloso y la novia desolada.” Me pongo muy triste a leer que Blanca está llorando durante todo el ceremonio, pero estoy de acuerdo con las palabras sabias de Clara, “Tantas lágrimas le harán daño a la criatura y tal vez no sirva para ser feliz” (231). A veces tenemos que actuar como una persona feliz para ser una persona feliz.
En esta parte del capítulo, conocemos a Amanda por primera vez, y por la descripción magnífica de Isabel Allende, yo puedo verla muy claramente en mi mente. Esta descripción ocurre en la página 230. Sabemos que ella va a ser un personaje importante en la novela, y en la página 236, podemos adivinar una pelea entre los mellizos sobre Amanda.
En la página 232, noté el contraste entre Blanca y Clara, que está descrito por Allende un párrafo antes del contraste entre Jaime y Nicolás. Yo quiero hablar más de estos contrastes grandes en clase; Allende está creando un mundo lleno de dicotomía, lo que es muy interesante para mí.
Y por fin, hay más sobre la política en este capítulo. Esteban será el senador, y me interesa mucho el imagen falso que él está tratando de mantener, porque podemos ver situaciones similares en nuestro país. Es muy común en la política. Pero parece que aún este honor de ser senador no llena un vacío en el corazón de Esteban; él está buscando algo que pueda ser su tesoro, pero en realidad este tesoro debe ser su familia. Y al final de esta mitad del capítulo, vemos el deterioro de la familia Trueba. Los tiempos duros van...
Igual como Nicole, mi atención fue llamada en el comienzo del capítulo. Puedo ver a Blanca y a Clara perfectamente; en este punto en el libro ya habían experimentado muchísimo y sufrido significantemente. Pero al llegar, empiezan a trabajar inmediatamente, tratando de llevar un poco de civilización a la casa que siempre conocían. Creo que la casa toma un papel bien importante en este pasaje. La familia la abandonó y la regresa a esta ubicación significa algo importante. Más importante es la falta de Esteban, y creo que es una reacción muy apropiada de las chicas a cerrar con candado su única protección de él. Necesitan un poco tiempo propia porque este hombre las golpeó.
Inicialmente, no presté mucha atención a las diferencias entre Jaime y Nicolás. Me interesó saber de sus intereses ciertas y como las siguieron, pero su interacción no me pareció tan importante. Aunque Esteban quería que unos hijos llevara su nombre propia, no creo que estaba pensando en estos mellizos. (Bueno, de cómo resultaron pensar del otro—si siempre están luchando, ¿podrán continuar su poder en la sociedad? ¿Perderá el significado bien conocido que tiene el nombre “Trueba”?) Pero a pesar de esto, vemos la fealdad de los hermanos a su papá cuando se sabe que Blanca está embarazada. Inmediatamente quieren advertirle al papá.
Aunque estaba dispuesto a dejar a Esteban a cambiar la vida y empezar de nuevo, siendo otra persona, perdí esto cuando vi su reacción al embarazo de su hija. Respeto que quiere mantener su reputación y evitar hijos bastardos en su familia, pero no parece apropiado involucrarse en la vida de su hija solamente para hacer esto cuando nunca le había importado mucho su vida antes. Además, siento un poco de simpatía por Jean de Satigny; creo que sería mejor vivir sin poder estar con Blanca que estar con ella mientras siempre está pensando en Pedro Tecero.
Amanda parece una presencia importante. Además de continuar el tema de hermanos durante el capítulo, parece ser alguien quién les mostrará a los hijos Trueba la verdad de quienes son. Esto aparece fuertemente durante su aborto—los hermanos están trabajando juntos sobre algo que necesitan resolver. Por supuesto esto incluye algo más importante, grande, y significante de solo la operación medical. Llega a ser exitosa en hacer esto, pero yo personalmente estaba triste de ver como terminó la relación que había entre Jaime y Nicolás, aunque no era significante. También me gustaba aprender de la interacción entre Miguel y Amanda. Creo que los hermanos siempre deben pensar en los intereses de sus hermanos y que la relación que existe entre hermanos es la más importante de una familia en total.
La política otra vez “muestra su facha fea.” A este punto en el libro, no tengo ni el menor respeto para Esteban; creo que solamente necesita la atención de los miembros de su familia y por eso ha mudado otra vez a la ciudad. Sería mejor persona si podía vivir sin ellos por unos meses porque ni el puede negar que en realidad no ha sido buen papá a pesar de sus otros roles.
Hace semanas y semanas la profesora Cuellar aseguró que en algún momento echaríamos una lágrima por Esteban. Yo no lloré de ninguna interpretación al leer la terminación de este capítulo, pero creo que entiendo mejor la situación de Esteban. Llegué a la conclusión que sigue: Él solamente es una persona con intención racionales que vive con la gente incorrecta. No puede respetar, aún sus propios hijos, personas que quieren hacer algo que no le cae bien. A mi no me gusta gente así—siempre son intolerantes y usualmente simplemente antipático. Estaba alegre que finalmente dejó de hacer preguntas sobre la gente que siempre estaba por la casa, pero sintió esta resignación por las razones incorrectas. Cuando se enfermó a la terminación, mi di cuenta que una vida que solamente no le ha quedado bien para nada está terminando, quizás un poco temprano.
2 comentarios:
Yo sé que decidimos que íbamos a comentar sobre cuatro partes de la novela, pero yo voy a dividir la lectura en dos partes para hacer más fácil el trabajo de comentar. (Pienso que Jorge hará lo mismo). Bueno, en la primera mitad de este capítulo, vemos un poco más de las vidas de los mellizos, Jaime y Nicolás. Me gusta esta vista más profunda de sus característicos y sentimientos, porque Isabel Allende no nos ha dado mucha descripción de ellos hasta este punto en el libro. El contraste que vemos entre los dos es inmenso, y yo adivino que va a crear problemas en el futuro.
Para comenzar con el principio, me gusta mucho la primera oración de este capítulo: “Clara y Blanca llegaron a la capital con el lamentable aspecto de dos damnificidas.” Es una declaración muy fuerte, y por eso me llama la atención. Cuando Clara regresa a la capital, ella se enfoca muy intensamente en los pájaros, y en mi opinión es increíble que ella pueda enfocarse en algo tan trivial como los pajáros en un tiempo así. Me parece que ella tiene que pegarse a algo tan menial para evitar los acontecimientos más tristes de su vida. En esta parte, otra vez vemos el contraste entre Blanca y Clara: Blanca está fijada en la tierra, mientras Clara está fascinada por los almas que habitan la casa (de verdad, este capítulo está lleno de los contrastes).
Después, podemos enfocarnos en la situación de Blanca. Por supuesto, es un situación terrible—ella está embarazada con el niño de Pedro Tercero García, pero cree que él ya está muerto por acción de su padre, entonces no ve otra opción que casarse con Jean de Satigny, aunque ella no tiene ningún sentimiento romántico hacia él. Y todo el tiempo, Esteban solamente está quejándose del escándolo que este embarazo puede crear en la comunidad. Vemos que, de verdad, él solamente piensa en sí mismo, y está sumergido en la forma de la cual los acontecimientos trágicos de los otros van a afectarle a él. La única parte cómica de esta situación es la reacción de Jean de Satigny. Allende lo describe perfectamente en la página 228: “El novio....en ese folletín.” En la página 229, en la descripción de la boda, hay un ejemplo de la exageración característica de Gabriel García Márquez, y aún más contraste, esta vez entre Jean de Satigny y Blanca: “el novio orgulloso y la novia desolada.” Me pongo muy triste a leer que Blanca está llorando durante todo el ceremonio, pero estoy de acuerdo con las palabras sabias de Clara, “Tantas lágrimas le harán daño a la criatura y tal vez no sirva para ser feliz” (231). A veces tenemos que actuar como una persona feliz para ser una persona feliz.
En esta parte del capítulo, conocemos a Amanda por primera vez, y por la descripción magnífica de Isabel Allende, yo puedo verla muy claramente en mi mente. Esta descripción ocurre en la página 230. Sabemos que ella va a ser un personaje importante en la novela, y en la página 236, podemos adivinar una pelea entre los mellizos sobre Amanda.
En la página 232, noté el contraste entre Blanca y Clara, que está descrito por Allende un párrafo antes del contraste entre Jaime y Nicolás. Yo quiero hablar más de estos contrastes grandes en clase; Allende está creando un mundo lleno de dicotomía, lo que es muy interesante para mí.
Y por fin, hay más sobre la política en este capítulo. Esteban será el senador, y me interesa mucho el imagen falso que él está tratando de mantener, porque podemos ver situaciones similares en nuestro país. Es muy común en la política. Pero parece que aún este honor de ser senador no llena un vacío en el corazón de Esteban; él está buscando algo que pueda ser su tesoro, pero en realidad este tesoro debe ser su familia. Y al final de esta mitad del capítulo, vemos el deterioro de la familia Trueba. Los tiempos duros van...
Igual como Nicole, mi atención fue llamada en el comienzo del capítulo. Puedo ver a Blanca y a Clara perfectamente; en este punto en el libro ya habían experimentado muchísimo y sufrido significantemente. Pero al llegar, empiezan a trabajar inmediatamente, tratando de llevar un poco de civilización a la casa que siempre conocían. Creo que la casa toma un papel bien importante en este pasaje. La familia la abandonó y la regresa a esta ubicación significa algo importante. Más importante es la falta de Esteban, y creo que es una reacción muy apropiada de las chicas a cerrar con candado su única protección de él. Necesitan un poco tiempo propia porque este hombre las golpeó.
Inicialmente, no presté mucha atención a las diferencias entre Jaime y Nicolás. Me interesó saber de sus intereses ciertas y como las siguieron, pero su interacción no me pareció tan importante. Aunque Esteban quería que unos hijos llevara su nombre propia, no creo que estaba pensando en estos mellizos. (Bueno, de cómo resultaron pensar del otro—si siempre están luchando, ¿podrán continuar su poder en la sociedad? ¿Perderá el significado bien conocido que tiene el nombre “Trueba”?) Pero a pesar de esto, vemos la fealdad de los hermanos a su papá cuando se sabe que Blanca está embarazada. Inmediatamente quieren advertirle al papá.
Aunque estaba dispuesto a dejar a Esteban a cambiar la vida y empezar de nuevo, siendo otra persona, perdí esto cuando vi su reacción al embarazo de su hija. Respeto que quiere mantener su reputación y evitar hijos bastardos en su familia, pero no parece apropiado involucrarse en la vida de su hija solamente para hacer esto cuando nunca le había importado mucho su vida antes. Además, siento un poco de simpatía por Jean de Satigny; creo que sería mejor vivir sin poder estar con Blanca que estar con ella mientras siempre está pensando en Pedro Tecero.
Amanda parece una presencia importante. Además de continuar el tema de hermanos durante el capítulo, parece ser alguien quién les mostrará a los hijos Trueba la verdad de quienes son. Esto aparece fuertemente durante su aborto—los hermanos están trabajando juntos sobre algo que necesitan resolver. Por supuesto esto incluye algo más importante, grande, y significante de solo la operación medical. Llega a ser exitosa en hacer esto, pero yo personalmente estaba triste de ver como terminó la relación que había entre Jaime y Nicolás, aunque no era significante. También me gustaba aprender de la interacción entre Miguel y Amanda. Creo que los hermanos siempre deben pensar en los intereses de sus hermanos y que la relación que existe entre hermanos es la más importante de una familia en total.
La política otra vez “muestra su facha fea.” A este punto en el libro, no tengo ni el menor respeto para Esteban; creo que solamente necesita la atención de los miembros de su familia y por eso ha mudado otra vez a la ciudad. Sería mejor persona si podía vivir sin ellos por unos meses porque ni el puede negar que en realidad no ha sido buen papá a pesar de sus otros roles.
Hace semanas y semanas la profesora Cuellar aseguró que en algún momento echaríamos una lágrima por Esteban. Yo no lloré de ninguna interpretación al leer la terminación de este capítulo, pero creo que entiendo mejor la situación de Esteban. Llegué a la conclusión que sigue: Él solamente es una persona con intención racionales que vive con la gente incorrecta. No puede respetar, aún sus propios hijos, personas que quieren hacer algo que no le cae bien. A mi no me gusta gente así—siempre son intolerantes y usualmente simplemente antipático. Estaba alegre que finalmente dejó de hacer preguntas sobre la gente que siempre estaba por la casa, pero sintió esta resignación por las razones incorrectas. Cuando se enfermó a la terminación, mi di cuenta que una vida que solamente no le ha quedado bien para nada está terminando, quizás un poco temprano.
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