sábado, 10 de noviembre de 2007

CAPÍTULO VI: La venganza

7 comentarios:

Jorge dijo...

Hemos necesitado un monólogo como esto por años, y es muy apropiado que venga de Esteban. Pues, él es la persona que está apareciendo ser lo malo, pero cuando Allende presenta las cosas de su perspectiva, otra vez tenemos (o quizás no tenemos) simpatía para él y su situación. Ahora su edad está avanzando, por supuesto más rápido que él preferiría. No podía casarse con Rosa, su matrimonio con Clara está terminando, no tiene un hijo con su apellido, se está dando cuenta que está perdiendo su poder a las Tres Marías, y la gente está sabiendo sus secretos, como lo de él y las chicas del campo que uso para placer sexual.

Pero yo tendría más respecto para esta situación triste si él hubiera hecho unas decisiones diferentes. No merece mis sentimientos porque era su decisión encargarse del campo, aunque ese trabajo inicialmente pareció ser algo diferente que lo que llegó a ser luego. Entonces, por brutal que sea este hombre, ojalá que él mismo reciba un poco de lo que ha dado a otros.

Noté que durante todo no mencionó la amenaza de una revolución. No creo que sepa mucho, pero eso es el tipo de problema que ha discutido en el monólogo.

Esteban está en problemas. Normalmente cuando uno está en problemas, solamente están teniendo dificultades y las problemas se van a arreglar. Los de Esteban no. No hay nada que puede hacer menos esperar una revolución. Si decidiera cambiar todo ahorita, la gente le mataría. Si espera una revolución, la gente le va a matar.

Jorge dijo...

Para la próxima reunión, debemos enfocarnos un poco en el estilo de la escritura, especialmente durante tiempos de narración muy importantes o momentos introspectivos de un personaje. Allende usa hermosamente sus palabras, especialmente para describir los cambios políticos. Me gustaba mucho el párrafo sobre el señor (o sea, monsieur) Santigny. Ella estaba discutiendo su visita al campo, y las únicas palabras dichas por una persona eran “Por lo menos nos saca de la barbarie.” Blanca podía decir cualquiera cosa que le estaba dando la gana, pero dijo eso. Significa mucho a mí que esa hija está pensando que la regla de su papá es un barbarie. Pues, lo es, pero a veces aun los hijos de los dictadores pueden estar de acuerdo con papás. Es un punto muy importante cuando la familia no está en el equipo de Esteban.

Otra vez que Allende muestra la independencia de Blanca era cuando Esteban estaba hablando de su matrimonio. Yo sonreí cuando Blanca no quiso escuchar más a su padre.

Entendí muy bien exactamente como era la muerte de Pedro el viejo, especialmente cuando Allende usaba expresiones como “bolsa de huesos.” Pero creo que su muerte va a significar mucho. La familia García siempre era la de poder en el campo, y ahora que su patrón ha muerto, puede significar el pasar del era de los García. Pues, Esteban ha tenido un rol de poder por mucho tiempo, pero ahora quizás va a hacer algo más serio. Pero quizás no, porque los García que le importan a él son Pedro Segundo y Pedro Tercero, y los dos están vivos y sanos.

Nicole dijo...

Me gusta muchísimo la independencia de Blanca que vemos en esta parte de la novela; por fin, ella está mostrando sus propias ideas, aún contra los deseos de su padre. Demuestra que ella también no tiene miedo de su padre, y es muy interesante pensar en el tono de sus interacciones.

También pienso que la descripción de la muerte de Pedro el viejo es magnífico; Allenda sabe la forma de decir esas cosas para que los lectores puedan ver la escena como si fuera enfrente de ellos.

Además, es raro que Esteban es la única persona que no sospecha algo sobre lo que está ocurriendo con Blanca y Pedro Tercero. Y tampoco sabe de la amistad entre Pedro Tercero y Jaime. Yo pienso que esta amistad va a tener mucha importancia en el resto de la novela; quizás Jaime va a ayudarle a Pedro Tercero a tomar el poder de Esteban.

Una cosa que me parece importantísima de esta parte es una oración en la página 203. Allende está escribiendo de Esteban García, el hijo del hijo ilegítimo de Pancha García y Esteban Trueba, y dice que “dentro de algunos años sería el instrumento de una tragedia para su familia [la familia de los Trueba].” Es muy siniestro, ¿no? Ahora sabemos que este hijo va a tener mucha importancia en la novela, y va a ser la causa de tanta tragedia que va a ocurrir para los Trueba. De verdad, este chico me asusta un poco.

Por final, quiero decir que me gusta la forma de la cual Allende sigue incorporando el cuento de las gallinas y el zorro. En la página 200, describe a Nicolás, uno de los mellizos Trueba, escribiendo que él es “astuto y rápido como un zorro.” Quizás esta descripción significa que Nicolás va a sigue el ejemplo de su padre, mientras Jaime, el otro, desarrolla una amistad con Pedro Tercero y toma el lado de los campesinos. También menciona el cuento en la página 205; Pedro Tercero está tratando de convencerles a los campesinos que ellos deben votar en la elección, pero ellos no están muy animados por esa idea, porque “La experiencia les había enseñado que el zorro siempre acaba por comerse a las gallinas.” Entonces este cuento es otra parte muy importante de la novela.

Nicole dijo...

Y una cosa más: pienso que el título de este capítulo tiene algo que ver con Esteban García, el chico del cual yo comenté. Allende escribe que él “vivió castigado por el rancor contra el patrón, contra su abuela seducida, contra su padre bastardo y contra su propio inexorable destino de patán.” (202) Pienso que este chico va a ser la fuente de “La Venganza.”

Jorge dijo...

¡Qué emocionante! Ahora, cosas están pasando, y la trama está poniéndose más interesante e emocionante. Ahora que Esteban ha tenido un deterioración mental y violenta, la gente ya no va a confiar en él (no que merece su confianza). Pues, es una pregunta si había alguien que todavía estaba confiando en él, pero ahora no.

En la mejor situación, esto solamente va a darle un poco de tiempo solo para reflexionar sobre las cosas y elementos de su vida que necesita cambiar. Quizás en esta situación completamente hipotética, las chicas de su vida regresarán.

Pero ya sabemos que eso no es lo que pasa en la realidad. Clara y Blanca van ahora a tener vidas diferentes, algo que impresionará a Esteban. Necesita enfrentarse completamente con la realidad de que es una persona (a este punto) horrible. Pero la cosa es que esas opiniones solamente vienen de las perspectivas, y tenemos muchas de ellas en el libro.

Para regresar a la capital, Allende nos recuerda un poco de la vida anterior de Clara y su familia del Valle. Aún menciona Barrabás. Me encanta ese estilo de escritura, porque sé que al final, todo va a conectar muy interesadamente.

Nicole dijo...

Al leer esta parte de la novela, casi eché una lagrima, pero no por Esteban. Primero, quiero decir que al saber del hecho de que Jean de Satignay iba a decirle a Esteban todo que él había visto con respecto al amor de Blanca y Pedro Tercero, me puse furiosa. Pareció que Jean y Blanca habían encontrado una forma de ser amigos, y nada más, pero todo el tiempo el conde estaba planeando la manera de la cual él podía tenerla como esposa. Él es ladino, en el significado más horrible de la palabra, y debe estar avergonzadísimo de sus acciones.

Me gusta lo que Clara dice en la página 213 sobre el amor de Blanca y Pedro; parece que ella es la única persona que tiene la fuerza de ser resistente contra Esteban y decirle lo que él tiene que oír. “ ‘Pedro Tercero García no ha hecho nada que no hayas hecho tú—dijo Clara, cuando pudo interrumpirlo—. Tú también te has acostado con mujeres solteras que no son de tu clase. La diferencia es que él lo ha hecho por amor. Y Blanca también.’ ” Aunque esta declaración resulta en un ataque de rabia para Esteban, estoy muy contenta de que ella lo haya hecho. Siempre podemos tener confianza que, cuando nadie va a decirle a Esteban la verdad de la situación, Clara lo hará.

Y ahora, Esteban tiene exactamente lo que debe tener en su vida: NADIE. Clara y Blanca han salido del pueblo, Clara nunca más va a hablar con su marido en su vida, y Pedro Segundo, el criado fiel, ha salido también. En pocas palabras, Esteban se llevó su merecido.

Profe Cuellar dijo...

Nicole y Jorge,
qué emocionante está la lectura y sus comentarios también están demostrando muchísima ilusión. Todavía me llama la atención que ninguno de Uds. dos haya echado una lágrima por Esteban, a pesar de ser un mal hombre, porque quizás es por eso que yo me siento mal por él. A veces creo que Esteban no quiere tener ese carácter y no quiere ser malo en el sentido de la palabra pero no puede evitar sus rabietas ni su forma de ser que lo atormenta hasta a él mismo. En cierto modo lo comprendo porque me pongo en su lugar y pienso que en el fondo él sufre más de lo que pensamos. Está bien, aceptaré que Uds. no llorarán por él,quizás tienen el corazón más duro de lo que imaginé. De todas formas yo ya eché unas cuantas lágrimas de cocodrilo por Esteban Trueba, aunque no lo crean. ¿Se puede entonces sentir compasión por alguien tan cascarrabias y que parece no tener corazón? Parece que la escritura es tan buena que en cierto modo me convence. No estoy de acuerdo con lo que hace ni con su reacción, pero sí me gustaría que cambiara y si lo hiciera, lo perdonaría. Tal vez yo deseo esto por mi propia paz interior más que por la suya.

Estoy de acuerdo contigo Nicole cuando mencionas que Satigny es un pesado y un metido en lo que no le incumbe. En cuanto a tu comentario Jorge, me parece muy bien que hayas resaltado el hecho de la mención que de nuevo se hace a Barrabás y que conectes eso con el estilo de Allende. En general, sus comentarios son magníficos y muestran un buen análisis de lo que leen demostrando no solo su capacidad de leer literatura sino que también su gran habilidad de análisis literario y de reflexión. Los felicito por todas estas fabulosas entradas. ¡No veo la hora de continuar las amenas charlas el próximo semestre!